La iniciativa del Gobierno español de regular la relación laboral de monitores y entrenadores con clubes y entidades deportivas sin ánimo de lucro a partir de la Ley 14/2013 de Apoyo a los Emprendedores, que incluye el control de la fiscalidad sobre la actividad desarrollada, ha movilizado ya al deporte del fútbol. Varias federaciones nacionales han realizado en las últimas semanas jornadas de huelga y miles de partidos oficiales de competición federada no se han jugado en señal de protesta ante esta iniciativa gubernamental a través del Ministerio de Empleo y que cuenta con el apoyo del Consejo Superior de Deportes (CSD). Este fin de semana del 7 y 8 de marzo le toca hacer huelga al fútbol y fútbol sala valencianos y, por tanto, también al de la comarca del Bajo Segura. Sin embargo, en el resto de modalidades deportivas no hay atisbo alguno de movilización hasta el momento, cuando la ley afecta a todos.
"El sueldo apenas cubre los gastos"
El diario digital Sport Vega Baja ha querido sondear con motivo de la huelga balompédica la opinión de algunos representantes del deporte comarcal en diferentes modalidades y distintas parcelas de trabajo. En primer lugar, Antonio Felices Ballesta, presidente del Orihuela CF y profesionalmente asesor fiscal, laboral y contable, así como administrador de fincas, manifiesta que "la FFCV nos reunió hace unos días a todos los clubes de la Vega Baja en Crevillente a una asamblea informativa para explicarnos el proyecto gubernamental y sus repercusiones sobre el funcionamiento y las relaciones laborales futuras con entrenadores y jugadores no profesionales sean de la categoría que sean. Según la ley, quienes perciban remuneración deben estar dados de alta y cotizar a la Seguridad Social. Esto creo que perjudica al fútbol si hablamos de categorías no profesionales o regionales y también perjudica al deporte en general, al que ya de por sí en estas categorías se ayuda poco desde las instituciones".
Felices, en rueda de prensa en el campo de Los Arcos.
En el caso del OCF, el presidente amarillo señala que "pese a lo que mucha gente pueda creer, nuestros jugadores y entrenadores apenas si cubren, con el dinero que reciben mensualmente del club, los gastos del desplazamiento a los entrenamientos y somos un club de Tercera División. Por otro lado, la FFCV nos explicó que otra de las razones para ir a la huelga es que la subvebción que hasta ahora llegaba a los clubes a través de la Federación Española también se iba a quitar. Por todo ello, estoy de acuerdo con la huelga", concluye Felices.
Lado positivo y negativo de la ley
Una segunda opinión de peso es la de Vicente Pérez, licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, profesor en un IES de Almoradí, directivo del Club Voleibol Daya Nueva y entrenador nacional de voley. "Mi opinión respecto de la aplicación de esta ley es ambivalente. Como licenciado en Educación Física y entrenador, veo correcto que el Gobierno quiera regular el trabajo que se hace en los clubes, porque eso supone dignificar la labor de entrenadores y monitores que han conseguido una titulación tras muchos años de estudio y preparación, así como darles una vida laboral oficial. Pero como directivo, en este caso del CV Daya Nueva, creo que la aplicación de esta ley va a hacer que se encarezca el trabajo en los clubes modestos y en poblaciones pequeñas o bien que directamente desaparezcan los clubes y que miles de niños se queden así sin poder practicar deporte. Esta ley no debería ser igual para todos, es decir, debería aplicarse de arriba hacia abajo en función de diferentes criterios, como por ejemplo la categoría deportiva que tenga ese club, el número de equipos que posea o el presupuyesto que maneje, entre otros tantos factores".
Vicente Pérez, con el equipo infantil del CV Daya Nueva
Por último, Vicente Pérez se siente "extrañado, porque a estas alturas sólo sea el fútbol el que ha empezado a movilizarse, ya que deberíamos estar moviéndonos los restantes deportes, porque la ley está hecha para todos".
"A los clubes amateurs no les salen las cuentas"
Finalmente, Sport Vega Baja ha recogido la opinión de Ángel Guillén, un oriolano que es en la actualidad jugador del Club Balonmano Almoradí y monitor de multideporte en el Ayuntamiento de Orihuela. "Hay aún muchas luces y sombras al respecto de la ley, sobre la que se está trabajando y que se quiere implantar. Tener que dar de alta a un monitor independientemente del dinero que reciba o incluso trabajando gratis es algo que necesita un profundo análisis. A los clubes modestos y amateurs no les saldrían las cuentas por ningún lado. Luego también depende de que estos clubes reciban algún tipo de subvención o ayuda económica, porque de lo contrario su continuidad sería imposible, al no tener apenas ingresos. Se dice que va a entrar en vigor para la temporada próxima 2015-16".
Ángel Guillén, bajo los palos en un partido de balonmano con el Monterrío Benejúzar
Guillén explicó que es "monitor, pero al trabajar en las escuelas municipales de Orihuela a través de la empresa Clequali estoy dado de alta y mi situación es legal, pero hay pueblos sin escuelas municipales donde los clubes se hacen cargo de la formación de los chavales y en la mayoría de los casos no tienen ayuda económica alguna de nadie, salvo las cuotas de los padres. Su subsistencia, si tienen que dar de alta a los monitores, es claramente inviable. Quizás habría que crear además del régimen general de la Seguridad Social algún otro régimen específico que diera cabida a estos casos". A Guillén también le sorprende que "sólo haya comenzado a estas alturas a moverse el mundo del fútbol con esas huelgas que ya se están haciendo. Parece como si la cosa no fuera con otros deportes. No lo entiendo. La ley va a ser para todos y nos va a afectar a todos. Creo que se puede cargar el deporte base, si no hay detrás una empresa fuerte o un Ayuntamiento con recursos que pueda pagar y dar de alta a los monitores".
(Fotos Sport Vega Baja y cedidas por CV Daya Nueva y CBm Monterrío)