El jugador del CD Almoradí Quique Granados ha sido sancionado con 22 partidos por el comité de competición de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana a raíz de su cabezazo al árbitro en el partido Villajoyosa-CD Almoradí jugado el pasado 23 de abril. El centrocampista azulgrana ha sido castigado "por agredir al árbitro y menospreciar notoriamente su autoridad", según el fallo del comité. En el partido jugado en La Vila, tras sufrir una falta de un jugador local, Granados vio la tarjeta roja. El futbolista quedó tendido en el campo, quejándose de dolor. El colegiado estimó pérdida de tiempo y lo expulsó. Entonces el azulgrana se levantó y se abalanzó sobre el colegiado, propinándole un cabezazo en la cara. El CD Almoradí ha desaprobado y condenado la acción del jugador y ha pedido disculpas al colegiado, al tiempo que manifiesta que el árbitro debió comprobar el estado físico del futbolista antes de proceder a su expulsión. El club de Sadrián señala además que en sus temporadas de militancia en el equipo azulgrana Quique Granados siempre ha sido un jugador caracterizado por su deportividad y también ha publicado en su página de Facebook unas fotos del estado de las rodillas del jugador tras su partido en La Vila, donde sólo estuvo diez minutos sobre el campo, entrando en el 72' por Sergio Poveda y siendo expulsado en el 82'.
(Foto Sport Vega Baja)
